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domingo, 29 de enero de 2012

Nueva vida: La reunificación

El centro donde vivimos, Esengo, es vida, alegría, esperanza... Veintiséis niños de los trece a los dieciocho años hacen el día a día aquí, en una casa muy familiar a pesar de que somos mucha gente: Padres, Hermanos, aspirantes, voluntarios...Por la mañana,los niños se levantan bien pronto sobre las seis, limpian las habitaciones, se arreglan ,desayunan y parten a la escuela en dos turnos(de ocho a doce ó de doce a cinco de la tarde) ; luego durante el día tienen muchas actividades y también juegos, claro. Bueno, pues aquí pasan mucho o poco tiempo dependiendo de las circunstancias familiares(si es que las hay, claro está). Algunos niños , abandonados por su familia y de los que no pueden o no quieren "ocuparse"(el fenómeno de la "brujería "aquí en Kinshasa es terrible; muchos niños están señalados de por vida por sus familiares porque los responsabilizan  de las malas cosas que les pueden ocurrir ; así, como os lo cuento. No hay manera de comprender este fenómeno porque es absurdo pero sobre todo muy dañino)permanecen en Esengo hasta los dieciocho años estudiando y aprendiendo algún oficio(panadero, sastre..) y esperando conseguir una ayuda para una pequeña vivienda y así independizarse y reintegrarse de alguna manera en la sociedad .
Otros niños, se reunifican de nuevo en la familia misma que los abandonó algún día. A lo mejor fueron incluso ellos mismos que se marcharon ellos, los niños, por el calvario que estaban viviendo en su propia casa .Puede ser que los padres reflexionen y admitan en la casa al niño y entonces dependiendo del tiempo en que se tarde en formalizar papeles, en hacer reuniones con la familia para tener la seguridad de una buena vida para el adolescente , éste estará unos meses en el centro o un par de años... quién sabe!
Os imagináis ? según lo escribo me doy cuenta de que lo que siento no hay manera de reflejarlo en un papel. ¿Qué seguridad pueden tener estos niños que desconocen dónde y sobretodo cómo van a acabar? ¿Cómo pueden volver de nuevo a la casa de donde un día los echaron, por mucho que aquí sea tan numeroso el colectivo de los niños de la calle que se vea como algo normal? ¿ Qué pasará por sus cabecitas cada día mientras se "busca un futuro que ellos no pueden dibujar"?
Pues mirad, creemos que viven más que nadie el día a día, que disfrutan de cada minuto , de cada comida, de la lluvia, del viento . del calor, del frío, del aire que respiran.........de la VIDA
Por aquí , en estos tres meses ya vamos viendo cómo van yéndose del centro alguno de los niños . Por ejemplo, hace dos semanas que se marchó Mbilizi, un niño que ha estado en el centro  desde septiembre del año pasado y que ya se ha reunificado ya y ha vuelto a su casa y lo vemos de vez en cuando, porque vive cerca de aquí, en Matete.
Mañana se va otro niño, Stalone a Brazaville con su madre; su padre ha muerto.Y el martes otro, Boniface, vuelve con su familia después de intentarlo muchas veces.
Ojalá les lleguen muy buenas cosas a éstos y a los que vengan. Que puedan aprovechar al máximo el tiempo que estén en este centro o en cualquier otro que les ofrezca educación, formación, salud pero sobre todo, AMOR

lunes, 23 de enero de 2012

aquí tenéis a nuestro amigo Joel

no podemos contestar

sólo esta entrada para deciros que no podemos contestar por alguna razón a los comentarios que nos escribís, así que ya iremos solucionando este problema informático ayuda!
Muchas muchas gracias a todos los que escribís y a los que nos leéis pero no escribís
Nos ayudáis más de lo que pensáis
Un fuerte abrazo

domingo, 22 de enero de 2012

Joel va a visitar a su mamá

Joel es un niño de unos once años(digo unos once porque muchos de los niños de Kinshasa que han estado viviendo en la calle no saben el día ni año en que nacieron; fijaros algo tan importante como esta referencia del nacimiento aquí no lo es tanto..) Es tan tan especial... Físicamente está muy flaquito pero le sale un poquillo de tripilla que le hace aún más gracioso. Tiene unos ojos que cuando te miran te deshacen, pero el secreto de Joel es su sonrisa. Su sonrisa acoge a todos los corazones y te invita a olvidarte de cualquier cosa mala que te haya ocurido(cosa"mala", si es que según lo escribo me río de lo absurdo de esa palabra aquí). Joel es uno de esos niños que han nacido con auténtica bondad; que lo sigue dando todo a pesar de la dureza de su vida y que no tiene ni un rinconcito para el rencor. Nos "arrea" cada abrazo todos los días que nos alimenta. Las matemáticas no son lo suyo pero hace unos dibujos impresionantes, que le salen de dentro; allí se ganaría la vida pintando, estoy segura. Cuando hemos preparado algo especial en la cocina parece que nos huele, porque ahí aparece con su delgado cuerpecillo y su sonsisa; se planta un trapo en la tripilla y ¡ale!, a remover la masa o a freír o a lo que haga falta
Cuando le hemos dado algún caramelito o chocolate(nos tenemos que contener, porque estaríamos siempre dándole cositas, pero ¿y a los demás?) siempre siempre guarda la mitad para otro niño que no es su amigo("sólo lo hace porque el otro chiquito tiene un caracter difícil y no se relaciona mucho con los otros"), ¿no es para comérselo?
Bueno, pues hoy está de camino para ver a su mamá. Vive aquí en Kinshasa y están estudiando la posibilidad de "reunificarlo"; esto es, de integrarlo en la familia. Ha vivido sin su mamá mucho tiempo: ¿os imagináis lo difícil para Joel? Está todo nervioso y le lleva un par de camioncitos de juguete a su hermanito y un jaboncito y alguna cosilla más para su mamá...
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Joel, que te vaya muy bien hoy y vuelvas con la misma sonrisa de siempre; que la vida te devuelva lo que cada día regalas a tantísima gente, que sigas enseñándonos a tantos que se puede vivir sin rencor, aún a pesar de que te hayan hecho tanto tanto daño y que sigas disfrutando tanto de la vida como cuando bailas tú solito, todo concentradito
Te queremos, Joel. Eres un sol

domingo, 15 de enero de 2012

Angeles Misioneros

El año nuevo se va desperezando lentamente, con la naturalidad del tiempo que pasa rápido porque no quieres que en el fondo termine lo que vives, y entonces pones todo tu empeño en atrapar cada instante. Fijaros, ya estamos a quince de enero…
Hoy nos gustaría hablar de los misioneros, de la gente que entrega su vida a los demás sin más contemplaciones que las destinadas a intentar ofrecer justicia y paz a la gente que sufre tanto tanto…Y todo ello bajo un gran telón de cariño. Hemos conocido a muchos de ellos, pero nos sigue admirando su generosidad, porque al margen de las creencias de cada persona lo que está claro es que todo el mundo que ha conocido a alguno de estos “Angeles”coincide en que allá donde nadie se atreve a llegar allí están ellos. Ofrecen salud, escuelas pero lo más importante: mucho amor
¿Cómo es posible que Carmen, misionera comboniana , a sus setenta y muchos, pueda seguir con energía y afán de mejora cada una de las muchas faenas que lleva a cabo cada día sin siquiera parecerlo?La hemos conocido esta tarde y estaba enferma, con paludismo(qué raro) y nos ha dado lo mejor de ella a pesar de la fiebre. Además transmitía tanta paz…
Otra misionera que te quita el hipo es María Luisa, hija de la Caridad, que lleva treinta y pico años en Congo y que ha escapado de muchas (incluso guerras ) pero que lo cuenta todo con tanta sencillez…
También Silvia, laica de Misevi (misioneros seglares vicencianos), quien es todo un ejemplo de humildad , coraje y capacidad de adaptación. Ha estado muchos años en Mozambique y también en Guinea Ecuatorial y otros lugares
El hermano Mauro, de la casa donde convivimos con nuestros niños, se entrega cada día en cuerpo y alma para conseguir el bienestar de estos pequeños abandonados. La pereza no cabe en su vocabulario
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La chispa en los ojos y una gran serenidad e ilusión te acerca a ellos, los Misioneros que son testigos de un gran Mensaje: el de la luz, el perdón .. El Amor…

Buena semana, amigos
A veces tenemos muchas dificultades con internet, ya sabéis.. Pero no os olvidamos
Un abrazo y gracias por estar ahí

sábado, 14 de enero de 2012

Los transportes de Kinshasa...

Hombre, también hay que hablar un poco de temitas un tanto frívolos como el transporte en Kinshasa...
Cuando llegamos nosotras, los primeros días estábamos un poco impresionadas, sobre todo por lo viejo de las pequeñas furgonetas que transportan a miles de personas todos los días, las camionetas están vacías por dentro: todo sacado para poner bancos de madera para que la gente nos sentemos, por buenas cuentas cinco en cada uno, y ojo con los tamaños y las alturas que te puede caer una buena, menos mal que no entendemos nada de lo que dicen;alucinadas también porque hay que saber primero dónde es que va uno y después entender lo que dice el "encargado" de gritar los destinos, amén de apretujones, codazos, carreras, subidas y bajadas en marcha; también se nos quedaban los ojos como platos porque ¿cómo es posible que nadie vea nada, cuando ni una sola de las "carreteras "(caminitos muchas veces) está iluminada?
Bueno, ni qué decir tiene que ya estamos más que acostumbradas a escuchar cada día la retahíla:"Matete Matete Lemba Lemba... etc etc" , y a entender que el que los compis de al lado del transporte vayan tan cómodos con las piernas abiertas a su antojo(menudos mosqueos me pillaba yo al principio, no lo entendía) no es por otra cosa sino para sostener el trasero del compi de delante; así como suena
A veces "se bloquea la furgo", que significa que se ha roto en pedazos y todo el mundo se baja de la camioneta, le da un par de tortas o no al conductor dependiendo de lo violentito-a de la clientela o simplemente vocifera... y aleh! a continuar el camino
Por la noche nos parecía también una imprudencia  ver caminando a la gente caminar a los bordes de la carretera, ... ahora ya si no vemos a la gente como que nos falta algo
Bueno, una nota de humor hay que poner
Un abrazo a todos, guapos(Kitokos en lingala)

miércoles, 11 de enero de 2012

Los reconocerás por la mirada

Los reconocerás muy fácilmente... Tienen la mirada distinta. Cuando posan sus ojos en los tuyos te dejan el alma bien tocada, tanto que te cuesta seguir caminando . Esos ojos pesan mucho de tanta intensidad. Lo saben ya casi todo de la vida, porque han visto tan de cerca al género humano... Con lupa, así, a lo grande, que aumenta lo bueno y lo malo que la gente hacemos. Han sentido mucho dolor físico pero esa profunda mirada no recuerda ese dolor, te inquieta porque te revela el sufrimiento moral y al mismo tiempo te "mide" casi sin quererlo para saber a qué clase perteneces. ¿La mezquindad te acompaña mucho últimamente?. El lo sabe, no lo dudes.
El otro día me fijé más especialmente en uno: tendría unos siete años y estaba sentado en un poste, bien erguido.Los ojos inmensos . Descalzo y con las ropas raídas . Miraba la vida exterior con bastante atención, a pesar del cansancio y de la falta de cariño. Nuestros ojos se cruzaron, me inquieté y en ese momento supe que no esperaba nada de mí...
Son los niños de la calle, que son abandonados desde bien pequeños. Y tienen la mirada distinta...

Nos sobran los motivos

Cristian es un niño muy alegre, siempre está con una sonrisa en la cara, siempre bailando, siempre hablando y algunas veces peleándose con los otros.  Es muy cariñoso, cuando entro en el Centro de point d’eau me abraza y me da un beso y me dice “bonjour”.
Pero hoy no, hoy está muy triste.  Le saludo y no me dice nada.  Le pregunto y me dice que no quiere hablar.
Al final de la mañana me coge de la mano y me hace señas para que le cure, todo en silencio.
Luego me enteré que su hermano pequeño había muerto.
Pretendemos que estén siempre alegres, ¿no estamos nosotros algunos días mal?, ¿por qué no ellos?.
¿Qué podía hacer yo?.  Solo acercarme, decirle “lo siento”, darle unos abrazos y unos besos.
De vuelta a casa, caminando sola, ¡pensaba tantas cosas!.
Ellos no tienen juguetes ni objetos personales, no tienen casa ni pueden comer cuando tienen hambre, ni tan siquiera ropa para vestirse (se duchan y se ponen la ropa húmeda que acaban de lavar, a mano por supuesto, o no se ponen nada hasta que se seca).
Y todas estas cosas que para nosotros serían un problemón no son tan importantes.  No, porque las siguientes, las que os voy a describir en la próxima lista, ésas lo son más y también carecen de ellas.
No tienen una familia, no tienen una madre o un padre que les consuele cuando están enfermos;  no tienen un colegio al que asistir;  por no tener no tienen ni fecha de cumpleaños, ¡sí, habéis entendido bien! porque algunos no conocen el día que nacieron.  A veces, hasta el nombre es uno que se han puesto durante su estancia en la calle.
Y sin embargo, casi siempre están alegres, te reciben con abrazos, con besos, con una sonrisa sincera que te levanta el ánimo.
¡¡Ellos a ti!!.  Ellos que no tienen nada a ti que lo tienes todo.  ¿No tendría que ser al revés?.
Otra vez, nos dan una lección de superación, de esperanza, de ilusión, de alegría, de …..
Cuando nos quejemos sin motivo, acordémonos de esto.